Estamos asistiendo a la mayor paradoja de la belleza: texturas ultra mate pero cremosas; con alta concentración de pigmento pero ligeras como la pluma; acabados en polvo seco pero que dejan un tacto suave y luminoso… Nos estamos haciendo con nuevos conceptos: Ultra mate reinventado, mate cómodo de nueva generación, polvo que se convierte en líquido cuando toma posesión de la piel labial… Pues sí, le toca el turno al labial en polvo que está revolucionando las tendencias en maquillaje esta temporada, aunque no es una novedad per se, Sephora ya cambió las reglas de juego hace unas cuantas temporadas con su Poudre Rouge à Lèvres, y muchos dicen que fue antes Pro Sculpting Lip de Make Up For Ever, un labial en dos fases con un extremo cremoso y el otro en polvo.

¿Y de dónde surgió el invento? Pues claro está, del mayor semillero de nuevas tendencias en belleza que es la K-Beauty. Los ombré lips empolvados empezaron a causar sensación por la innovación que suponían respecto a lo que hasta el momento había en el mercado. Y es que el formato polvo tiene muchas ventajas (los pigmentos se absorben en lugar de asentarse simplemente en la superficie del labio asegurando una mayor durabilidad, no migra el color y su aspecto etéreo era muy difícil de conseguir con otro tipo de labiales), pero también algunas desventajas (resecaba en exceso los labios por lo que se hacía imprescindible exfoliar regularmente y acondicionar con un buen bálsamo nutritivo). Entonces llegó el Poudre a Lèvres de Chanel que incorporaba en la paleta una interesante novedad: al polvo le acompañaba un bálsamo acondicionador, una suerte de pre-base que solucionaba los pequeños inconvenientes que tenía esta férrea textura.
Pero el batallón de esta temporada viene pisando fuerte, Chanel da un giro de tuerca con Rouge Allure Liquid Powder (35 €), la nueva generación de mates líquidos que ofrecen una sensación empolvada, intensidad de color, larga duración, y gran confort. Disponible en una paleta de 6 tonalidades, la cobertura se puede modular gracias a sus pigmentos ultra micronizados y un aceite ligero que garantiza una distribución óptima del producto. Más ventajas: su aplicador en esponjilla facilita la aplicación y su novedoso formato lo hace colgarse el cartel de nómada.

Luego está L’Absolu Rouge Drama Matte de Lancôme (34,50 €). Lisa Elbridge, la directora creativa de maquillaje de Lancôme, ha ingeniado una completa gama (15 tonos) de mega mates confortables que se declinan en rojos ardientes, naranjas fascinantes, rosas cándidos, marrones profundos… Yo soy fan de 157 Obsessive Red, un rojo anaranjado que no pasa nada desapercibido y que se engancha a los labios y no los suelta así comas, bebas o hables de forma desmedida. Infalible. Además incluye tres hazañas de la formulación que parecen más una parajoda que una proeza tecnológica: tres tonos ultra mate metalizados, ¿cómo es posible? Pues aquí está el resultado, en tonos cobre, oro y azul croma, se pueden usar solos o combinados para dar un twist al maquillaje labial. Lo interesante de Drama Mate es su fórmula: complejo Soft-Complex, que combina polvos esféricos (alisan las arruguillas del contorno de labios) y aceites nutritivos como el de jojoba (aseguran su cremosidad).

Otra interesante apuesta es la de M·A·C Cosmetics y sus Powder Kiss Lipstick (19,50 €), 16 tonos empolvados, texturas aterciopeladas de sensación sedosa que dejan un velo de color a la vez que acondicionan e hidratan los labios. Saldrán a la venta este mes de octubre pero ya fueron sometidos a prueba en el backstage de la pasada edición de la New York Fashion Week superando la prueba con honores. ¿El resultado? Labios livianos, de contornos borrosos, difuminados, casi etéreos…, los que las tendencias no han tardado en denominar “Blurred lips” (quédate con el dato porque serán los protagonistas de los próximos informes de tendencias).
¿Qué será lo próximo? Dicen que cuando una tendencia llega a su extremo, se produce una reacción inmediata hacia el polo opuesto. Puede que en años venideros rindamos pleitesía a las texturas ultra brillantes más innovadoras que la industria haya concebido, mientras tanto, al menos yo, voy a seguir disfrutando de la revolución del mate que tantas alegrías me está dando…
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