El sol se resistió pero llegó y ha caído sobre nuestras cabezas con todo el peso del estío. Hay ganas de playa, de pieles doradas y de ver platear el mar en el horizonte. Puedes ahogar tus ansias en la terraza del barrio con una buena piña colada, pero si las piernas color alabastro asoman, el bajón está asegurado. Que no cunda el pánico. La industria de la belleza viene al rescate con un arsenal de buenas intenciones que sirven de antesala a la alta vibración del verano. Lo más revisado por editores de belleza de todo el mundo son los nuevos autobronceadores en gotas que revolucionan el clásico ritual del self-tan por su aroma (no huelen a manteca rancia como sus antecesores), su fórmula (con ingredientes nutritivos y respetuosos con la piel) y su logrado tono dorado natural efecto anti-cheetos (porque no contienen DHA o dihidroxiacetona, la responsable del tono anaranjado). Quien se haya autobronceado en el pasado, sabe a qué me refiero.
Marcas como Tan Luxe han creado hasta un “Tanifiesto” declarándose la antítesis del autobronceado de antaño. Fórmulas libres de DHA, con ingredientes naturales como el aceite de semilla de frambuesa, vitamina E y aloe vera, de aroma agradable y teñido casi transparente, dorado natural, sin fronteras de color, sin dramas… Sus Illuminating Self Tan Drops, en versión Face y Body, son unos prácticos goteros diseñados para mezclar de 1 a 4 gotas en la hidratante habitual o el serum para sumar un toque de tono y luminosidad. Aporta un bronceado gradual, a medida, impecable. Puede que por ello se haya convertido en la firma de autobronceadores más aclamada por modelos y celebrities varias.
Otra de esas expertas en el fake tan, solicitada y venerada donde las haya, es St Tropez, con una interesante y extensa gama de producto. Dentro de sus últimas novedades está Self Tan Purity Bronze Water Mousse, de textura acuosa y aplicación en mousse que refresca e hidrata al instante además de proporcionar un seductor tono dorado con aroma tropical. ¡Ay, el aroma tropical!, otro de los ingredientes esenciales de esta tropa de aliados estivales para hacernos sentir dando un paseo por Malibú aunque estemos cruzando la M-30. Monoï Body Glow de NARS, es como darse un garbeo por la Polinesia francesa gracias a la flor de Tiaré infusionada en aceite de coco, la vainilla y el ylang-ylang. Coconut Body Glow Oil de Kopari, rinde tributo a la gardenia; Lumière Body Oil Bronzing de French Girl Organics, rezuma jazmín y neroli; y la novedosa bola bronceadora y contouring on-the-go Bronzing Ball de Madame La La, al sempiterno coco universal. Así la rutina es como estar en una playa si hueles a ella…
Porque la suma de color y buen olor es el binomio imprescindible de este verano. Y para muestra: L’Eau Tan de Chanel, un mist corporal refrescante de bronceado progresivo y ultra natural pensado para utilizar cuando nos plazca. Está inspirado en un producto de bronceado creado por Coco Chanel en 1932, y la fragancia, como no podía ser de otra forma, está diseñada por el nariz in house de la Maison: Olivier Polge. Todo un lujo.
Pero si a pesar de todos los avances sigues prefiriendo el tono brasileño de quita y pon, lo mejor son los aceites corporales con pigmento y partículas irisadas que nos regalan buen tono al instante de forma reversible. Es decir, te lavas y se esfuman. Hay algo mágico en esos destellos resplandecientes chisporroteando por mejillas, extremidades y hasta el hueso de la clavícula, como si pasearas escoltada por el mismísimo astro rey… Son otro de los fenómenos fuertes de este verano. No hay aceite corporal de cabecera que se precie sin que aloje en su interior algún tipo de partícula que potencie el glow. Míticos ya como Soleil Blanc Shimmering Body Oil de Tom Ford, que además de dejar la piel reluciente como besada por el sol captura el aroma de islas tropicales de arena fina; o ultra novedosos y con lista de espera como Body Lava de Fenty Beauty, ese velo corporal tan seductor que ha hecho acabar con el stock.
Sol de Janeiro replica el aroma de Brasil a caramelo salado, higo silvestre y gardenia con sus nuevos Glow Oils Copacabana Bronze e Ipanema Sunset, con la cantidad justa de brillo para acentuar las curvas y capturar cada matiz de luz de las costas cariocas. Además nutren en profundidad gracias a su fórmula con aceite de coco, manteca de Cupuaçú y Kukui. Vacaciones embotelladas, imposible resistirse…
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